miércoles, 26 de agosto de 2015

Acróstico para ADRIANA

Además de encantadora, fluye en ti la simpatía de ilustre soberana,
Dios sabe que se te admira, en tu tierra de limones, cocos y palmeras
Representante excepcional de la belleza armeritense, en nuestro “máximo festejo”.
Infinito, es el gozo que nos da escucharte, por tu lúcido intelecto,
Ámbito excepcional, la “Feria de Colima”, para demostrar tu gallardía
Nunca de des por vencida, que Armería está contigo reina mía

Activa y decidida, triunfarás por Armería.

miércoles, 14 de mayo de 2014

“Hipótesis sobre origen del nombre de Armería”


Con profundo respeto para quienes han escrito sobre este apasionante tema -que no son pocos- y con el sano propósito de contribuir con mis modestas investigaciones en el esclarecimiento exacto sobre el origen del nombre de nuestro pueblo, en esta colaboración, me permito examinar algunas de las hipótesis expuestas por voluntariosos autores, a quienes debemos, entre otras aportaciones, el rescate y preservación de muchos datos, que hoy, son fuente de consulta obligada para escribir nuestra historia local.

Cómo preámbulo a mi análisis, permítaseme, aclarar -primero- lo que significa el vocablo Armería. En efecto, desde el punto de vista etimológico, la palabra “Armería” se deriva del latín “armarium”, que expresa: "…lugar o sitio en que se guardan armas…". Más, si le agregamos la terminación conexiva “ia” que “…connota oficio, práctica o actividad…”, la expresión Armería significa: "...lugar o sitio especializado en la venta, almacén o fabricación de armas..."; luego entonces, el nombre de nuestro pueblo, nada tiene que ver con la connotación etimológica de la palabra Armería.

Por tratarse de una de las hipótesis que más transcriben no pocos autores, me referiré, en primer término, a la expuesta por mi caballeroso amigo Profr. Juan Oseguera Velázquez, quien en su "Directorio del Estado de Colima”, sostiene que "...que el nombre de Armería, tiene su origen en el hecho de que, en tiempos de la colonia, existía allí un destacamento de guardias virreinales que daban garantías a las conductas y viajeros que transitaban el Camino Real…” Y que, a este destacamento por "tradición popular" -inicialmente- se le conoció como "La Estancia de las Armas" y que años más tarde "por costumbre", se le denominó: "Estancia de la Armería", de donde, afirma, tomó su nombre lo que fue la "Hacienda de Armería", antecedente inmediato del "Pueblo de Armería".

Sobre este particular, está demostrado en serios estudios, de bien documentados investigadores, que la “…Nueva España nunca contó con un ejército regular…[1] Hubo sin embargo, diferentes tipos de milicias, por lo general poco numerosas y no permanentes, salvo excepciones, como la muy tardía Compañía de Lanceros de Veracruz, creada en el siglo XVIII. Esta aparente paradoja –en una tierra de guerras y guerreros- se explica, primero, como práctica heredada de los ejércitos de la conquista, que no estuvieron nunca formados por soldados profesionales, sino por aventureros dispuestos a arriesgar sus bienes, armas, caballos y vidas, a cambio de botín. Pero sobre todo, el que no se tratara de crear, y de hecho se evitara la formación de un ejército regular en la Nueva España se debió al temor de la Corona de que se convirtiera en el núcleo de la rebelión. Fue hasta la época de los Borbones, en la segunda mitad del siglo XVIII, cuando se realizaron los primeros intentos serios en el sentido de dar forma a un ejército regular”.

Continuando con esta vertiente de milicias y supuestas guardias Virreinales o de la Corona, Juan Carlos Reyes, nos demuestra en su acuciosa investigación que en Colima “…debido a la constante amenaza que representaban los piratas…” hasta el “…Siglo XVIII se organizaron compañías de “pardos” –mulatos-, bajo el mando de españoles…” hasta llegar a “…seis compañías de milicias: una de mestizos en el pueblo de San Francisco de Almoloyan, cuatro de pardos en Colima y una en la congregación de Tecalitlán…” (Concluye la cita), como puede observarse, no se hace ninguna mención a compañía o grupo de milicias en la entonces “Estancia de la Armería”, lo que nos invita -a concluir-, que está hipótesis, definitivamente debe desecharse.

En esta misma línea, los autores de la “Enciclopedia de los Municipios de México”, editada en 1999 por el Centro Nacional de Desarrollo Municipal, concuerdan con otros escritores, en el sentido que existen varias explicaciones sobre el origen del nombre de Armería, insistiendo, que “...que ahí se "Armaban barcos", otra que existía una hacienda denominada con ese nombre; También se sabe que en los tiempos de la colonia existía en ese lugar un destacamento de guardias virreinales que daban garantías a las "conductas" y viajeros que transitaban por el camino real de Colima; posteriormente una hacienda fue el punto de partida del núcleo de población...”

Ahora bien, utilizando la técnica de separar las ideas principales, mis reflexiones, procuraré explicarlas a través dos vías:

Primera. Se afirma, que “...ahí se "Armaban barcos"...” Sobre improbable aseveración, desde mí muy particular percepción y por falta de evidencias históricas esta hipótesis también debe rechazarse ya que en Armería “nunca se armaron barcos”, lo que quiere decir, que ésta es una generosa imprecisión. Ha mayor abundamiento, desde el punto de vista lingüístico un lugar donde se “arman barcos” recibe el nombre de “astilleros”, luego entonces, esta aseveración nada tiene que ver el vocablo de “Armería”, como líneas arriba quedó anotado.

Segunda. Armonizando con la mayoría de los autores, también, erróneamente se consigna  “...que en los tiempos de la colonia existía en ese lugar un destacamento de guardias virreinales que daban garantías a las "conductas" y viajeros que transitaban por el camino real de Colima...”. Sobre este particular, ratifico que en la “…Nueva España nunca contó con un ejército regular…, luego entonces, las supuestas “guardias virreinales” solo se localizan en ficciones, cuentos y fantasías, que nada tienen que ver con el origen de mi pueblo y menos aún con su toponimia.

En efecto, no hay documentos históricos o vestigios que comprueben fehacientemente que en Armería haya existido el trillado “destacamento de guardias virreinales”. Lo que sí está comprobado, es el hecho, que en la segunda mitad del siglo XVIII se formaron en la provincia de Colima  “…seis compañías de milicias: una de mestizos en el pueblo de San Francisco de Almoloyan, cuatro de pardos en Colima y una en la congregación de Tecalitlán…”[2], por lo tanto, tampoco existieron “compañías de milicias” en lo que hoy es Armería.

Siguiendo en este complicado laberinto de textos, crónicas y contextos, mi estimado amigo Miguel Ruelas Jaramillo en su maravilloso libro: “ARMERÍA, Pueblo joven que lucha por encontrar su propio destino”, nos comenta que siendo alumno de la primera escuela rural federal “Revolución” (1947) sus maestros le enseñaron que el origen del nombre nuestro pueblo, “...se remonta al siglo XIII, cuando el río Armería era caudaloso y en la margen derecha, los aborígenes armaban balsas de madera para cruzar el río...”; y continuando con su exposición nos relata: “...Luego, cuando por acá llegaron los misioneros españoles, al encontrarse con este puñado de seres humanos organizados y capaces, que tenían una destreza singular para armar sus balsas y navegar en las correntadas del río, al dar información a los superiores eclesiales, se expresaban que “a orillas del río estaba una Almería ” y estos jerarcas de los misioneros, a su vez los reportaron a los jefes militares conquistadores como una “Armería” de armas...”, y amplía sus comentarios: “...O sea; misioneros y militares, calificaron el nombre, conforme a su propio ángulo de vista y, a sus particulares intereses, el nombre de ese ancenstral y pequeño asentamiento humano nacería con esa dualidad, de místicos ALMEROS católicos y ARMEROS militares de la Conquista Española...” y concluye: “...por muchísimos años persistió esa , hasta que la Corona Española, les consintió mas beligerancia a los militares... luego estos descendientes de los criollos españoles... Dejaron de usar el vocablo para mencionar La ...” De lo anterior deduzco, que para los maestros del “filosofito” el origen del nombre de “Armería” tiene dos vertientes: de o de .  Analicémoslas:

Por lo que se refiere a la vertiente de “Armería” de “armeros”: no hay documentos históricos o vestigios, ni del siglo XIII o posterior a la conquista, que comprueben fehacientemente que en las márgenes del hoy Río Armería haya existido un grupo de “armeros de balsas”. Por lo que se refiere a la vertiente de: “Almería” de “almas”, con todo espeto, la considero un poco más fantasiosa que real.

Continuando con tema de los “armeros”, en una ocasión el Lic. Raúl Arias Luna me comentaba que uno de los lugareños le había expresado que nuestro pueblo tomo su nombre de los “...armeros del puente del ferrocarril...”, a lo cual le contesté que esa era una nueva mentirigilla, dado que la vía del ferrocarril, en su tramo de Armería a Manzanillo se había iniciado en 1881, en tanto que, desde 1687 ya se tienen noticias de la entonces ranchería de Armería.

En otra dirección, el Padre Salvador Murguía en un ensayo escrito sobre la Parroquia de Tecomán consigna: “…algunas personas afirman que se denomina Armería porque había una familia con ese nombre. Todas las casas eran de palapa o de sácate y no había Capilla. Cuando el Sr. Cura de Tecomán iba a celebrar la Santa Misa tenía que celebrarla en casa particular, que en algunas ocasiones fue la de Don Serapio Sánchez…”[3] (concluye la cita). Sobre esta vertiente, comento, que desde 1989 tengo comunicación con Don Alfonso Armería Mondragón, jubilado ferrocarrilero que actualmente radica en la ciudad de Aguascalientes, con quien estamos esclareciendo el origen del apellido “Armería” mediante un estudio del árbol genealógico de su familia; luego entonces, en esta dirección, no hemos encontrado documentos, que prueben alguna relación de sus ancestros u otras familias de apellido “Armería” con la entonces “ranchería” o “hacienda de Armería”.

Para concluir, la hipótesis con mayor sustento documental e histórico,  es la que nos presenta en su libro la Los pueblos del Valle de Tecománel Pbro. Roberto Urzúa Orozco, quién apoyándose en registros de los libros de la Parroquia de Santo Santiago de Tecomán, revela que en “…1687 se registraron 5 entierros del Rancho de Almería …”; consecuentemente, sostiene que el nombre de Armería proviene por “corrupción” de “Almería”.

Con el mismo tema, en su Trilogía Histórica de Tecomán”, el Pbro. Roberto Urzúa Orozco escribe: “…Armería, corrupción de Almería, ciudad capital de su homónima provincia española y verdadero origen del nombre del pueblo, que se había trasladado del margen del río a una legua más al sur desde el año de 1875 no llegó a tener una población autóctona ni constante, sino hasta principios de este siglo en que se estableció donde hoy se encuentra; pero se vino a consolidar cómo pueblo en el año de 1932 cuando por los maremotos del mes de junio los numerosos habitantes de esa región costera se concentraron en dicho lugar…”

Con el ánimo de estudiar con mayor profundidad la hipótesis que nos ofrece el Pbro. Roberto Urzúa Orozco, en marzo de 2005 estando de visita en España, visité la provincia de Almería y ahí indagué que el vocablo “Almería se deriva del árabe andalusí “al-mariyya”, dicción que se compone de los vocablos “al” que expresa “lugar” y “mariyya” término que a su vez se forma de “mara´a” que enuncia los verbos “observar o vigilar”; lo que quiere decir, que la “Almería” hispano-islámica significa “lugar que se observa o vigila”.

Para explicarme el origen del vocablo “Almería”, en ese Ayuntamiento se me explicó, que 400 años a.c., ésta región, eminentemente comercial y pesquera, pasó de los Griegos a los Fenicios y que aquí en el año 200, (a.c.) durante las Guerra Púnicas, Anibal, orgnizó su ejército para emprender por tierra “la conquista de Roma”, objetivo que lo llevó a la derrota.  Una véz que los romanos ampliaron su imperio en los litorales del mar mediterráneo, denominaron a ésta región “Portus Magnus”.

El nombre de “Almería” surge con la ocupación musulmana que inicia en el siglo X, fecha en que se construye una “alcazaba” (fortificación) con su respectiva “Atalaya” (Torre) para vigilar la vahía de “vayyana”, de ahí su nombre de “Almería”, <lugar que se observa y vigila con el propósito central de custodiarla de posibles invasiones>.

Así, la ciudad española-musulmana de “Almería” fue fundada por en el año 955 por el califa Abderramán III y hasta el año de 1489 se incorporo a la Corona de Castilla.

                                                                                                       Colima, Col. 13 de mayo de 2014

Miguel CHÁVEZ MICHEL
Cronista Municipal de Armería





[1]REYES G., Juan Carlos.La Antigua Provincia de COLIMA. Siglos XVI al XVIII. Tomo II de la Historia General de Colima”. Coedición de la Universidad de Colima, Gobierno del Estado, Instituto Colimense de la Cultura y Coordinación Nacional de Descentralización. Páginas 204 y 205.

[2] REYES G., Juan Carlos. Obra citada.
[3] MUNGUÍA S, Salvador.INFORME SOBRE LA PARROQUIA DE TECOMÁN”, Documento que rescata el Pbro. Crescencio Brambila en su libro “EL OBISPADO DE COLIMA, Apuntes Históricos, Geográficos y Estadísticos. Colima 1964. Página 242  

miércoles, 26 de marzo de 2014

Personajes de Colima: "Miguel Chávez Michel"

Revista Colima es... Tu historia. Tu tradición. Tu espacio

Profr. Ramón Serrano Ahumada
Colima, Col. Marzo de 2014


Miguel Chávez Michel, catedrático universitario, orador, crónista municipal, politólogo, columnista, analista político y destacado liberal colimense. Es originario y vecino de Armería, estado de Colima, México. Nació el 8 de octubre de 1947, fue el tercero de doce hermanos, hijo de Miguel Chávez Vega y Magdalena Michel Araiza. Tiene dos hijos: Carlos Alberto Chávez López (Licenciado, Maestro y Doctor en Educación Física) y Glenda Oralia Chávez López, quién además de Maestra en Trabajo Social, es licenciada en Psicología y en Ciencias de la Comunicación.


El Maestro Miguel Chávez Michel es licenciado en Ciencias Políticas y Administración Pública y licenciado en Educación Media Básica y Media Superior, con especialidad Historia. Ambas carreras cursadas en la Universidad de Colima. Además es diplomado en “Habilidades Docentes” por el Instituto Tecnológico de Monterrey. Campus Colima y, realizó estudios en “Partidos Políticos y Sociedad Global” en la Universidad  Complutense  de Madrid, España.

En su larga carrera académica, de 1974 a 1981 fue catedratico en la Escuela Técnica de Agricultura y los bachilleratos de Armería y Tecomán. De 1981 a 2008, año en que se jubiló, fue maestro de tiempo completo en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad de Colima, en donde fue Director (1983-1985). Como funcionario universitario desempeñó varios encargos, entre otros, fue Delegado Regional No. 3, Campus Colima (1985-1988), Director del Centro de Estudios de Opinión Pública. CEOP (1994-98), Subdirector de Capacitación del Centro Universitario de Apoyo a la Productividad. CEUNAPRO (1998-2003) y Asesor Técnico de la Coordinación General de Vinculación de la Universidad de Colima (2003 - 2008). También fue Presidente fundador (1985-1988) de la Federación de Egresados de la Universidad de Colima (FEUC).

Es un apasionado de la política, actividad que práctica, por convicción y formación. Vive para la política, no de la política. Como militante del Partido Revolucionario Institucional, desde muy joven, incursionó en esta actiuvidad, en donde ha destacado como dirigente, impulsor de jóvenes y formador de nuevos cuadros. A sido Presidente del Comité Municipal del PRI en Armería en tres ocasiones (1973-1975), (1977) y (1979) y en el Comité Directivo Estatal del PRI se ha desempeñado como Secretario de Organización (1979-1983), Oficial Mayor 1983-1986), Presidente Fundador del Instituto de Capacitación y Desarrollo Político, Filial Colima (1997-1999), Secretario de Operación Política (1999-2000), Secretario Técnico (2002-2005) y Presidente de la Comisión Estatal de Procesos Internos del PRI, cargo que desempeña desde el año 2005.

En la administración pública fue Secretario del Ayuntamiento de Armería (1974-1976) y Presidente Municipal de Armería (1989-1991) y desde 1996 ocupa el cargo de Cronista de Armería.

Como destacado miembro del Círculo Liberal Colimense, después de escalar una larga carrra de grados simbólicos y filosóficos, fué venerable Maestro de la Logia Acacía No. 1 (1988-1989), Secretario (1992-1994) y posteriormente, Muy Respetable Gran Maestro de la Gran Logia “Sur Oeste” del estado de Colima (1994-1996). Además, ocupó el cargo de Presidente del Círculo Liberal Colimense (1994-1996) y Secretario de Finanzas de la Confederación Nacional de Grandes Logias Regulares de los Estados Unidos Mexicanos (1995-1997).

Entre sus actividades sociales, es miembro activo del Club de Leones de Armería, A.C., de la Asociación Colimense de Periodistas y Escritores, (ACPE), de las Asoción de Cronistas de Pueblos y Ciudades del Estado de Colima, de la Confederación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas y asociado fundador de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos.
Como columnista, ha sido colaborador del periódico “Diario de Colima (Crónicas de Armería) y, como analista político, ha participado con sus opiniones en el programa de “Ángel Guardián” de la estación colimense XERL del grupo Radiolevy.

Entre los muchos diplomas y reconocimientos con que lo han distinguido a lo largo de su carrera, el 26 de mayo de 2008, LV Legislatura del H. Congreso del Estado, en Sesión Solemne, le entregó un reconocimiento por su trabajo de toda una vida como Académico, Servidor Público y como Cronista de la Ciudad de Armería. El 11 de marzo de 2011, el Partido Revolucionario Institucional le entregó la presea al Mérito Militante “Antonio Salazar Salazr”. En la Universidad de Colima, recibió las preseas, “José Beítez Ochoa” (1989), “Gral. Pedro Torres Ortíz” (1994) y “Universidad de Colima” (1999). El 10 de noviembre de 1996, la “Gran Logia Sur Oeste” del estado de Colima le otorgó la presea “Cuchara de Oro” y el Título de “Gran Past Master”, máximo galardón que se otorga a los miembros de esa institución.

Además de sus crónicas, ha publicado varios ensayos y libros, entre los que destacan, “Historía Gráfica de Armería” (1986) y “Armeria. Una Vista al pasado” (2009). También es coautor de los libros “Pasajes de la Revolución en el Estado de Colima” (2010) y “Geografía de los Municipios de Colima” (2012). Estos dos últimos, ediciones de la Asociación de Cronistas de Pueblos y Ciudades del Estado de Colima.

miércoles, 19 de junio de 2013

Salución a Norma I reina del Club de Leones de Armería (2013)

Salutación a Norma I
Reina 2013-2014
Del Club de Leones de Armería

Autoridades leonísticas e invitados especiales
Estimado público
Amigos Todos

El orador, político e historiador de Roma, Marco Tulio Cicerón, en su “República” nos ilustra, que "la gratitud, no solo, es la más grande de las virtudes, sino la madre de todas las demás." Y que la gratitud, “inspira, en los seres humanos, sentimientos de agradecimiento, reconocimiento y compromiso por los favores recibidos”. En esta tesitura, a nombre del Club de Leones de Armería, por tu esfuerzo, altruismo y trabajo, te expresamos a ti, Estíbaliz I, nuestro público reconocimiento y la seguridad de nuestra permanente gratitud, fraternal amistad y solidario afecto.

Con la rúbrica de nuestro aplauso, te decimos, muchas gracias reina mía.

Amigas y Amigos

En la cosmogonía de las culturas occidentales, el agua, la tierra, el aire y el fuego, son los cuatro elementos, que rigen el orden y la vida de todo cuanto existe en el universo. Visión cíclica del tiempo y esencia armónica de nuestra naturaleza.

Por ello, aquí y ahora, en el alba de un nuevo día, alzo mi humilde pregón, para proclamar a los cuatro vientos, que Norma I, es la nueva soberana del Club de Leones de Armería.

Encantadora Soberana

Tu nombre, de origen latino, representa las reglas jurídicas y morales que regulan la convivencia humana. Luego entonces, tu temple, firmeza y fortaleza, personifican la originalidad, la integridad y la rectitud.

Con estas esencias, tu nueva potestad, te da el privilegio de demostrarte a ti mismo y obsequiar a nuestro colectivo, tu capacidad para actuar, tu potencialidad para innovar y la alta posibilidad de trascender.

En este orden de ideas, atractiva soberana, en tu honor, consiénteme dedicarte este modesto acróstico que se inspira con tu nombre.

NORMA

N
oche de gala, porque hoy te coronamos, reina de los leones de Armería,
O
bséquianos siempre, tu juvenil, emotiva y vigorosa nobleza,
R
azones que inspiran, humildad, cariño y pasión, por la filantropía,
M
ujer  de grandes de iniciativas, siempre nobles, humanas y caritativas,
A
abre tu corazón y coloca en tu horizonte, torrentes de amor, altruismo y alegría.

Que Dios te bendiga. Reina mía.


Es cuánto.



lunes, 27 de mayo de 2013

XLVI Aniversario del Municipio de Armería

Estimadas autoridades
Invitados especiales
Público en general
Amigas y amigos todos

Con el privilegio de poder dirigirme a ustedes, con humildad, respeto y gratitud, hago propicia la ocasión, para expresar, en el marco de este aniversario, la seguridad de mi permanente gratitud, por la oportunidad que me brindan, de sumarme, con mis modestas palabras, al propósito central de honrar la memoria de los hombres y las mujeres, que hicieron posible, que el H. Congreso del Estado, promulgara, el 26 de mayo de 1967, la creación del Municipio de Armería.
                                                                   
Desde luego, ésta efeméride, es una valiosa oportunidad de reflexión colectiva y educación cívica, en donde, además de glosar los acontecimientos que nos permitieron alcanzar la categoría de municipio, se sustenta, en la noble intención de consolidar nuestra identidad local, reforzar la conciencia ciudadana sobre nuestros orígenes y el significado histórico de ésta conmemoración.

En la memoria colectiva de todos los pueblos, existen fechas, eventos y contingencias, que resumen su historia y, por su trascendencia, además de referentes épicos, son veneros socioculturales que conforman el sentido de pertenencia de los habitantes de una comunidad, como la nuestra.

En efecto, en nuestro devenir, la creación del municipio de Armería, compendia lo que fuimos, lo que somos y lo que seremos como sociedad, producto del esfuerzo que genera el arraigarse con amor en estas tierras, en donde por igual, nativos y avecindados, han trabajado, para hacer de Armería, la casa grande en donde vivimos todos.

Para satisfacción de propios y extraños, somos un pueblo pluriétnico y pluricultural producto del trabajo de muchas generaciones. En esta región de la costa colimense, entre contingencias meteorológicas de agua dulce y agua salada, en tierra fértil y esfuerzo firme, prosperaron comunidades indígenas como Coatlan, Coyutlan y Tequepa. También en este lugar, se establecieron grupos de colonizadores y ambos, fertilizaron la estirpe de una comunidad plural y cosmopolita. Con el trascurrir del tiempo, excepcionales avecindados enriquecieron nuestro mestizaje.

En el siglo XIX y en el primer tercio del siglo XX, aquí, florecieron las Haciendas de Armería, Cuyutlán y Paso del Río. Con la llegada del ferrocarril se abrieron nuevas tierras al cultivo y con el reparto agrario se alentó la llegada de nuevos pobladores a esta planicie costera.

El maremoto del 22 de junio de 1932, fue fundamental detonador, para elevar el número de habitantes, lo que motivó, que la entonces ranchería de Armería, fuera elevada a la categoría de pueblo, mediante Decreto No. 44 expedido por el H. Congreso del Estado el 29 de abril de 1935.

En el período comprendido de 1935 a 1967, nuestros padres, sin mayor capital que la fertilidad del suelo y el amor a la tierra, en su permanente esfuerzo por forjar su propio destino, no hubo reto que los amedrentara, ni circunstancia que los derrotara; por el contrario, unieron voluntades, trabajaron en equipo y agudizaron sus sentidos de exitosos emprendedores, trasformando, con la fuerza de su brazo, éstas tierras otrora inhóspitas, palúdicas e insalubres, en un vergel, hasta alcanzar, el añorado sueño, de ver a nuestro pueblo, transformado en Municipio.
Su precedente más próximo, lo encontramos en el sexenio 1961-1967) período en que fueron Presidentes de la H. Junta Municipal de Armería Don Jesús Vaca Farías y Don Eusebio Michel Rincón y ambos, con el respaldo del Pbro. Juan Hernández León, destacados pobladores, agricultores y los comisariados ejidales de la época, solicitaron la creación del Municipio de Armería al gobernador Francisco Velasco Curiel.
Los estudios socioeconómicos y topográficos pertinentes para sustentar la inminente iniciativa para que el pueblo de Armería se le concediera la categoría de Municipio fueron elaborados por el profesor Juan Oseguera Velázquez y al cartógrafo Elías Méndez Pizano.

Con estos antecedentes, a las doce treinta horas del día 26 de mayo de 1967, en el entonces centro escolar “Presidente Adolfo López Mateos”, que albergaba a la Escuela Federal Revolución en sus turnos matutino y vespertino y a la Secundaria por Cooperación No. 16, se verificó la Sesión Solemne de la cuadragésima primera Legislatura, en donde, se dio lectura al decreto No. 119, por el que se elevó a la categoría de Municipio a la zona agrícola conocida con el nombre de Armería.

Cumplimentando el orden del día, fueron designados los diputados Herminio Málaga Rojas y Enrique Bayardo López para introducir al Sr. Gobernador, quién ya se encontraba en el exterior del recinto, acompañado del  Presidente del Supremo Tribunal de Justicia, Lic. Julio Santana, el Presidente de la H. Junta Municipal Eusebio Michel Rincón, los Presidentes Municipales de Manzanillo, Luis García Castillo; de Coquimatlán, Antonio Estrada Márquez; de Colima, Octavio Urzúa Quroz; de Comala, Alfredo Rocha Contreras; de Cuauhtémoc, Gonzalo Verduzco Curiel; de Ixtlahuacán, Francisco Bueno Larios; de Minatitlán, J. Ascención Yánez; de Tecomán, José Espinoza Rivera, de Villa de Álvarez, José Inés Ramírez Cobián y el Regidor de Armería en el Ayuntamiento de Manzanillo Lino Corona Pérez.

En el desarrollo de la sesión, el diputado Roberto González Fuentes procedió a la lectura del Decreto No. 119. El diputado por el VII Distrito (Manzanillo) Herminio Málaga Rojas, dirigió un emotivo y conceptuoso discurso y posterior al mensaje del Sr. Gobernador, un joven maestro de la escuela Independencia, el Profesor Manuel Godina Velasco, por decisión de los líderes locales, a nombre de nuestro pueblo, le correspondió agradecer la honrosa distinción de habernos otorgado la categoría de municipio.

El diario oficial de la época relata, (abro comillas) “…La aprobación del Decreto fue sancionado por el numeroso público asistente con un nutrido y prolongado aplauso acompañado de una algarabía producida por más de un centenar de vehículos, tractores y las campanas de la iglesia, todo ello, en señal de júbilo, por este histórico acontecimiento que crea el décimo Municipio del Estado de Colima…” (Cierro comillas). Posteriormente, con cohetes, el continuado repique de las campanas, danzas folklóricas, bandas de guerra, mariachis, chirimías y bandas de música, entre gritos de júbilo, llantos de alegría y aplausos de agradecimiento, desfilaron contingentes de rurales, grupos de hombres de a caballo, los trabajadores de la fábrica de coco, salineros, niños y mujeres con vestidos típicos, tractores y carros alegóricos adornados con instrumentos de labranza y productos del campo.

Hoy, es un día especial. Es un día de fiesta. Es un día de unidad. Hoy, es el día del Municipio que forjaron nuestros padres. Sí amigas y amigos míos, hoy, en el contexto de este mago acontecimiento, créanme, aún vibran en lo más profundo de mis recuerdos, aquellas apasionantes y sentimentales emociones, que los jóvenes de la época, sentimos, al observar, escuchar y ser testigos, que el esfuerzo de nuestros mayores era coronado con el inicio de una nueva etapa para nuestro pueblo.
Semanas posteriores, el domingo 19 de noviembre de 1967 se efectuaron las elecciones locales para integrar el Primer Ayuntamiento de Armería. En el actual salón de usos múltiples Gustavo Alberto Vázquez Montes, se ubicaba el entonces “Cine Victoria” y que posteriormente se denominó “Cine Armería”, a las doce horas del lunes primero de enero de 1968 se instaló formalmente el primer Ayuntamiento que presidió Don Rosalío González Espinosa. Fue testigo de honor, el gobernador Pablo Silva García.

Años más tarde, el 31 de agosto de 1988, a iniciativa del Gobernador Elías Zamora Verduzco, el H. Congreso del Estado, mediante Decreto No. 167 elevó a la categoría de Ciudad la cabecera del Municipio de Armería.

Por todo lo anterior, en el espacio de esta fiesta cívica, aquí y ahora, para los fundadores, que ya rindieron tributo a la tierra que hicieron fructificar, hago votos, para que mis modestas palabras, en su memoria, sean un timbre de honor. Para los que aún viven compartiendo sus nobles experiencias, con gratitud y afecto les decimos muchas gracias.

Muy respetable audiencia.
Hoy, a cuarenta y seis años de distancia de habérsele otorgado la categoría de Municipio al pueblo de Armería, esta Sesión Solemne del Honorable Cabildo, nos proporciona un excelente espacio, primero, para que no se nos olvide nuestro origen; segundo, para que recordemos con gratitud, la perseverancia y el espíritu de lucha de nuestros padres, y tercero, para que juntos reflexionemos sobre el futuro que queremos para las nuevas generaciones.

Amigas y amigos todos.

Armería no es un pueblo más, tiene un origen cosmopolita y una microhistoria única y como el árbol que se nutre de la buena tierra, tiene un pasado colmado de realizaciones, un presente con enormes potencialidades y un futuro pleno de esperanzas y grandes desafíos; pero requerimos con urgencia, de un verdadero renacimiento de mentalidades y actitudes, que rompan inercias, que parecen condicionarnos.

En esta tesitura, tomando como ejemplo la tenacidad de nuestros mayores, requerimos de un nuevo modelo colaborativo que impulse la innovación, el emprendimiento y la creatividad para ubicarnos nuevamente a la vanguardia y en la ruta del crecimiento.

En su tiempo, con firmeza y visionario esfuerzo, nuestros padres y abuelos, hicieron su tarea. Llegaron a éstas tierras, sin más capital que su fuerza de trabajo. A pico y pala construyeron canales de riego, hicieron norias, sembraron cultivos perenes, construyeron carreteras y caminos saca cosechas, introdujeron la luz eléctrica y redes de agua potable, edificaron infraestructura urbana y nos dotaron de buenas escuelas. Hasta tuvieron tiempo para heredarnos parcelas en producción, tractores, vehículos y buenas casas, que hoy, con tristeza observamos, que por falta de mantenimiento se están cayendo.

A nuestros padres, nunca se les olvidó, que “la tierra, es de quien la trabaje”, luego entonces, jamás rentaron sus parcelas. Y, cuando el cansancio los agotaba, renovaban sus energías, cantando el himno del agrarista;

“…Marchemos agraristas a los campos
a sembrar la semilla del progreso,
marchemos siempre unidos sin tropiezo,
laborando por la paz de la nación.

No queremos ya más luchas entre hermanos,
olvidemos los rencores compañeros,
que se llenen de trigo los graneros
y que surja la ansiada redención…”

Lamentablemente, hoy, ya no conocemos la letra y menos la música. Tal vez será, porque nosotros lo heredamos todo y nuestros mayores, en cambio, tuvieron que tomar las armas para defender las tierras que les dio la Revolución.

Amigas y amigos míos.

En el pasado, además del paludismo, víboras y alacranes, también hubo ciclones, maremotos, temblores y plagas. Además, hay registros, que los cristeros y grupos de bandoleros, en más de una ocasión, vinieron y les quemaron a los campesinos sus humildes chozas. Y nuestros ancestros, sin mayor impulso que el amor por la tierra, volvieron a levantarse.

Hoy, en efecto, son otros los tiempos y otros los problemas, pero también, nuevos tiempos, reclaman de todos nosotros, nuevos compromisos. Aquí y ahora, en este hermoso escenario de reencuentro con nuestras raíces, hagamos el compromiso de realizar nuestro superior empeño para construir un destino común, que ofrezca, a las nuevas generaciones, solidaridad social, mayores oportunidades de bienestar, progreso, equilibrio ambiental y un crecimiento económico dinámico y sostenido que genere los empleos e ingresos necesarios para mejorar la calidad de vida, desarrollo, paz, armonía y tranquilidad social.
Por lo anteriormente expuesto, con emoción, alegría y esperanza, concluyo mi humilde intervención, invitándoles, para que, así como nuestros padres y abuelos, desafiaron adversidades trabajado desde la aurora del día, hasta el crepúsculo del atardecer; nosotros, hagamos un esfuerzo adicional en la titánica encomienda de recuperar nuestra agricultura.
Sí amigas y amigos.
En un clima de buena voluntad y desarrollando al máximo nuestras potencialidades, con el mayor de nuestros empeños y lo mejor de nuestras voluntades, unidos y con orden, con renovado espíritu colaborativo, por la nueva grandeza de armería, “en terreno fértil, con esfuerzo firme”, no abandonemos nuestros cocotales, démosle valor agregado a nuestro productos, diversifiquemos nuestra producción, busquemos nuevas alternativas que nos permitan elevar la productividad y trabajemos con amor esta tierras calurosas, francas, nobles y generosas.
El pasado, el presente y el futuro de Armería, querámoslo que no, sigue siendo el campo. Esa, es nuestra vocación. Ese, es nuestro destino, vivámoslo plenamente. Quién no quiera trabajar sus tierras, mejor, que se vaya de Armería.
Felicidades y enhorabuena.

Muchas gracias.


Miguel Chávez Michel
Cronista Municipal


Armería, Col. Mayo 26 de 2013.

sábado, 2 de junio de 2012

Salutación a Estíbaliz I


Reina 2012.2013 del Club de Leones de Armería

Muy respetable Audiencia
Buenas noches

Inspirado en sentimientos de gratitud, mis primeras palabras son para tí Rosy I, hermosa y candorosa soberana 2011-2012. Hoy, al concluir tu potestad, a nombre del Club de Leones de Armería, por tu esfuerzo, entrega y trabajo, recibe nuestro puntual reconocimiento, la seguridad de nuestra permanente gratitud, fraternal amistad y solidario afecto.

El altruismo, sensibilidad social y vocación de servicio, que normaron tu cetro, son referentes que engalanan a nuestro Club, por ello, con la rúbrica de nuestro aplauso, te decimos, muchas gracias por siempre.

Amigas y Amigos

En el imaginario de la civilización maya, Itzamná, divinidad de los ritmos que armonizan el movimiento de los cuerpos astrales; Dios de las estaciones del año; deidad del día y de la noche; supremo señor del tiempo, que representa la energía y el renacimiento en la naturaleza; concepción cíclica de la vida y la muerte, que a través de etapas, en equilibrio universal con el movimiento celeste, nos ilustra, que todo cuento existe, se transforma para un nuevo amanecer en la entelequia de la naturaleza y el tiempo.

Así, en el alba de un nuevo día equinoccial, sincronizando mis ideas con los ritmos de la vida y la muerte; de la luz y la oscuridad, que también representan el descenso de Kukulcán a la tierra, desde lo más alto de la pirámide de Chichéntiza, inspirado en el maravilloso espectáculo de la serpiente emplumada, con la energía del astro rey, alzo mi voz, para pregonar a los cuatro puntos cardinales que Estíbaliz I es la nueva soberana del Club de Leones de Armería.

Felicidades reina mía.

Estíbaliz I

Tu nombre, de origen vasco, significa “Tan dulce como la miel”, para los castellanos  “Dulce de miel”.

Tú signo: enuncia simpatía, dulzura, originalidad y gentileza. En el plano sentimental, los astros me señalan que eres amorosa y romántica. Tu naturaleza emotiva, se expresa en la perseverancia de tu carácter. Luego entonces, tú nombre, naturaleza y signo, fraguan, tu perfil emprendedor.

Con estas esencias, hoy te proclamamos nuestra soberana y a partir de esta fecha, con tu simpatía y la constancia de esfuerzo, convencidos estamos, que la potestad de tu nueva jerarquía, será luz y fuerza en nuestra filantropía.

Encantadora soberana

En tu honor, consiénteme dedicarte este modesto acróstico que se inspira en tu nombre.

ESTIBALIZ

E
ncantadora majestad de los leones de Armería,
S
ímbolo distintivo y emblema de nuestra filantropía;
T
ú nombre, naturaleza y signo, también, son nuestra alegría,
B
ella y atrayente infanta, con tu dulzura, conquistas y seduces,
A
, avistando tu hermosura, te proclamamos nuestra reina,
L
inda soberana que los astros guían,
I
mpulsos  celestes recibes,
Z
arza divina, que desde el “Monte de Sión” te ilumina, cuando “nosotros servimos”.

Que Dios te bendiga reina mía.

Felicidades y enhorabuena.

Miguel Chávez Michel

lunes, 30 de mayo de 2011

Salutación a Rosy I (Rosa Imelda)

Reina 2011-2012 del Club de Leones de Armería, A.C.

Muy respetable Autoridades leonísticas
Estimada audiencia
Señoras y Señores
Amigos Todos.

Mis primeras palabras son para ti Daniela I

Inspirado en sentimientos de gratitud, por tu esfuerzo, entrega, talento y trabajo, por mi conducto, el Club de Leones de Armería, A. C. te formula nuestro público reconocimiento por las actividades realizadas en el reinado que con dinamismo y diligencia concluyes.

Convencidos estamos, que tu potestad, con eficiencia, eficacia y originalidad engalanaron a nuestro colectivo. Luego entonces, con gratitud, satisfacción y orgullo, de todo corazón, con la rúbrica de nuestro aplauso, te decimos, Muchas Gracias.

Amigos todos.

Las primitivas sapiencias de los tiempos milenarios, en su observación cotidiana, no obstante, las diferencias conceptuales, entre los pueblos de oriente y occidente, con grandes similitudes, ambas culturas, coinciden, que los fenómenos celestes, a través de los elementos, tierra, fuego, aire y agua, rigen las actividades humanas, de forma tal, que los doce signos zodiacales representan las doce personalidades básicas se los seres humanos.

Por ello, fiel a nuestras tradiciones, hoy, en el primer tercio del mes de mayo, en que se consuma la primavera y la humedad ambiente, nos anuncia que inicia el umbral de un nuevo verano, cantando himnos de alegría, alzo mi voz, para proclamar de Norte a Sur, de Oriente hasta Occidente, pasando por septentrión y mediodía, que a partir de esta fecha Rosy I, es la nueva soberana del Club de Leones de Armería.

Rosa Imelda.

Rosy para los que te apreciamos y respetamos.

Tu nombre de “Rosa”, de origen latino, significa “Hermosa”. La denominación de “Imelda” deriva del hebrero y expresa “Dios Escucha”.

Ambos fusionados, simbolizan: “que hermoso es saber escuchar a dios”.


Con tu signo de “Aries” comienza el Zodíaco, lo que representa el primer estadio vital de nuestra existencia, cuando, tras el nacimiento, empezamos a ser individuos por nosotros mismos.

Una vez que crecemos, para alcanzar nuestros sueños, tu signo, connota liderazgo, encarna el fuego que engendrar sed de nuevas conquistas y representa la energía que aviva la canalización de renovados esfuerzos.

Tu naturaleza emotiva, se expresa por medio de la perseverancia, la firmeza, la solidez y la tenacidad. Por tu temple, eres inquieta e independiente, amas las innovaciones y simpatizas con la filantropía.

Por consiguiente, tus nombres, naturaleza y signo, representan el misticismo de saber escuchar a Dios, la fuerza la fe y el resplandor del fuego que moldean tu perfil sociable y emprendedor, nos enuncian un futuro halagador.

Encantadora Soberana.

Con estas esencias, tu nueva jerarquía, te da el privilegio de demostrarte y obsequiarnos tu capacidad para actuar; tu potencialidad para innovar y la posibilidad de trascender.

Por ello, atractiva infanta, en tu honor, consiénteme dedicarte este modesto acróstico que se inspira con y en tu nombre.


ROSA

Ríe princesita, delicada y cuidadosa,
Original y emotiva, diligente y hacendosa;
Sabes lo que te motiva, integradora y misteriosa,
Al iniciar tu reinado, convencidos estamos, emprenderás grandes cosas

IMELDA

Inmensa es nuestra alegría, al proclamarte reina de los leones,
Maravilloso espectáculo, radiante de alegría, nos dejas con tu juventud y filantropía;
Enigma puro de la naturaleza bella,
Linda y misteriosa, celestial soberana,
Dotas de amor cuando “nosotros servimos”,
Así eres tú, pétalo de rosas, que, con tu sonrisa, convences y encantas a quien te mira.

Felicidades y enhorabuena.
Armería, Col. Mayo 28 de 2011

Miguel Chávez Michel
chavezmichel@gmail.com
chavezmichel@hotmail.com